lunes, 17 de febrero de 2020

CÓMO ELABORAR KOMBUCHA




HISTORIA DE LA KOMBUCHA
Los orígenes de la kombucha son inciertos, existen numerosas evidencias de que ha sido una bebida conocida y apreciada en muy diversos países, épocas y culturas.
Los primeros registros históricos que hacen referencia a la kombucha proceden de la dinastía Tsim, en el siglo III antes de nuestra era, época en la que era conocida como “El té divino” y “La medicina de la inmortalidad.” Sin embargo los alemanes Steiger y Steinegger sitúan su origen en la antigua Rusia. De cualquier modo, existen evidencias de que la kombucha era conocida hace ya más de 2,000 años tanto en Rusia como en China, Filipinas, la India y Japón.
Una prueba de la amplia difusión de  la kombucha son los diferentes nombres que con el transcurso del tiempo ha ido acumulando. Günter Frank cita más de 70 nombres distintos.
Una tradición cuenta lo siguiente: En el año 414 a.C. un monje tibetano llamado ”Kombu” fue a la casa real del emperador Inkyo y este probó la bebida  y la disfrutó tanto que quedó prendado de inmediato. Recomendó la fabricación en todo su imperio.
“Kombucha” significa “té de Kombu”.
 La Kombucha es té fermentado, y para procesarlo hace falta té, azúcar y una serie de hongos y microorganismos que son los que le darán las propiedades de las que todo el mundo está hablando. Estos hongos son como la masa madre en el pan o los hongos lácticos en los yogures, a este hongo se le conoce como SCOBY  (Symbiotic Culture Of Baceria and Yeast)





Estos hongos lo que hacen es crear una capa en la parte superior del bote donde se ponga a fermentar.


¿CUÁLES SON SUS PRINCIPALES BENEFICIOS?
Los beneficios que se le atribuyen son muy variados. Además de potenciar el sistema
inmunológico y de tener un poderoso efecto desintoxicante, numerosos testimonios le
acreditan cualidades tan diversas como:
– ser ligeramente laxante y evitar el estreñimiento.

– aliviar la artritis.
– limpiar el colon y la vesícula.
– mejorar la digestión.
– eliminar las canas (el cabello blanco recobra en muchos casos su color natural).
– aliviar el asma.
– regular el apetito y eliminar la grasa corporal excesiva.
– aliviar el estress.
– mejorar la visión, especialmente en los casos de cataratas.
– eliminar dolores de cabeza y migrañas.
– aliviar las molestias de la menopausia.
– eliminar el acné, la psoriasis y otros problemas cutáneos.
– reforzar el cabello y las uñas.
– potenciar el sentido del olfato.
– eliminar las infecciones de cándida.
– bajar el nivel de colesterol.
– bajar la presión sanguínea.
– dar elasticidad a los vasos sanguíneos.
– mejorar el funcionamiento del hígado.
– promover la longevidad.
– eliminar las manchas oscuras que con la edad aparecen en la piel
regula la flora intestinal
tiene efectos antivíricos y antibacterianos
activa la defensa del cuerpo
desintoxica el organismo
mejora la digestión de las proteínas
estimula la circulación
facilita la absorción de minerales
activa las funciones del páncreas
equilibra la glucosa sanguínea
aumenta la secreción de azufre fisiológico, vitamina B12 y vitamina  K
aumenta el bienestar
aumenta la capacidad física





MODO DE PREPARACIÓN
Antes que nada es necesario tener listos todos los ingredientes y utensilios que se van a utilizar. Es primordial tener en cuenta que  hacer kombucha o cualquier tipo de fermento, requiere paciencia. Por ello, fermentar no sólo aporta nutrientes y organismos beneficiosos a nuestra alimentación. También nos ayuda a comprender y a apreciar el valor del proceso.   La espera vale la pena.


INGREDIENTES
Un SCOBY (Hongo)
Azúcar
Cultivo iniciador (té fermentado de un lote anterior).KOMBUCHA


UTENSILIOS
Una olla grande de acero inoxidable o porcelana en buen estado.
Una cuchara de madera
Un recipiente de vidrio, para la fermentación (de1  litro, 2 litros, 3 litros)
Una tela de algodón limpia o un filtro redondo de café
Una liga o un elástico
Una coladera

                        PARA UN CULTIVO SANO (SCOBY)
Proporción de Agua
Cantidad de Té
Cantidad de Azúcar
Cantidad de KOMBUCHA
(Cultivo Iniciador)
1 litro
1 1/2 cucharadita de té en hojas o 2 bolsitas de té
1/4 taza o 55 gr
1/2 taza
2 litros
3 cucharaditas de té en hojas o 4 bolsitas de té
1/2 taza o 110 gr
1 taza
3 litros
4 1/2 cucharaditas de té en hojas o 6 bolsitas de té
3/4 taza o
165 gr
1 1/2 tazas

HIGIENE
Una vez listos los ingredientes y utensilios, es necesario lavarse bien las manos con jabón, quitarse los anillos
También hay que lavar y enjuagar a conciencia y enjuagar todavía mejor el bote y todos los utensilios que entrarán en contacto con el SCOBY.
El recipiente de vidrio donde se va  a fermentar el té,  se puede lavar con jabón normal y agua caliente, debe enjuagarse perfectamente. También se puede usar vinagre blanco para enjuagar.





PROCEDIMIENTO:

1. Hervir el  agua  en una olla esmaltada, de acero inoxidable o de cristal . ¡Evitar cualquier utensilio de aluminio!
2. Cuando haya hervido durante cinco minutos añadirle el  azúcar  y dejar que hierva dos o tres minutos más.
3. Quitar la olla del fuego e introducir las bolsitas de té verde ( que no tengan grapas metálicas).
4. Dejar que el té repose en el agua entre 15 y 20 minutos.
5. Transcurrido ese tiempo sacar las bolsas de té y dejar que el líquido se enfríe. Cuando haya alcanzado una temperatura cercana a la del medio ambiente, pasarlo al recipiente donde se va a fermentar.
6. Añadirle el té ya fermentado. (KOMBUCHA)
7. Colocar con cuidado el cultivo sobre la superficie del líquido. No importa si se hunde.
8. Colocar la tela o filtro de café,  sobre la boca del recipiente de fermentación y sujetarla firmemente con una goma o elástico.
9. Situar el recipiente en un lugar tranquilo, donde no reciba humo de tabaco,  ni los rayos directos del sol y dejarlo reposar entre 8 y 14 días, dependiendo de la temperatura ambiental. Durante la fermentación, desprenderá un cierto olor ácido o incluso avinagrado, es necesario tener lo en cuenta a la hora de seleccionar el lugar donde se va a dejar. No es conveniente moverlo, pues ello puede alterar y retrasar el proceso. Durante la fermentación el azúcar es descompuesto por la levadura y convertido en un gas (CO2), varios ácidos orgánicos y otros compuestos químicos, siendo el conjunto de todo ello lo que da a la kombucha su característico sabor.
10. Entre 8 y 14 días después (en climas templados) se podrá ya cosechar el delicioso té. Al quitar la tela veremos que en la superficie se ha formado otro cultivo (el “hijo”), si el primero quedó arriba tal vez ahora estén los dos pegados y será necesario separarlos. Para checar el sabor del te  hay que meter con cuidado un popote , lo más cerca del fondo del recipiente, intentando molestar lo menos posible al nuevo SCOBY que se ha formado en la parte superior del líquido. Después, tapar con un dedo el orifico superior del popote, sacar  el popote del recipiente y echa el líquido atrapado en el a un vasito y probarlo.
En este punto, tu kombucha ya tendrá un  sabor ácido del fermento. Para cosecharlo en el momento apropiado según el gusto particular de cada quien, pues unos lo prefieren más dulce y otros mucho más ácido.
Es más, algunas personas prefieren su kombucha tras haber fermentado tan sólo una semana. Mientras que otros prefieren por una fermentación de 2 o 3 semanas. No obstante, que en los períodos más cortos de fermentación dan como resultado una bebida más dulce. Por el contrario, con los períodos más largos, obtenemos una kombucha con un sabor más ácido, tirando a avinagrado.
11. Pasar el té a botellas o frascos y guardarlo en el refrigerador (se puede colar si se desea). Las botellas no deben llenarse hasta arriba y es conveniente utilizar tapones de corcho o de plástico sin rosca, para evitar que a causa del gas carbónico pudieran estallar. El proceso de fermentación sigue en el refrigerador aunque a menor ritmo.  No olvidar  dejar ½ taza del líquido fermentado para añadirlo a la nueva fermentación.
12. Iniciar todo el proceso de nuevo. Para la siguiente fermentación se puede utilizar indistintamente el cultivo nuevo o el viejo. El sobrante se desecha (mejor no tirarlo en el WC, pues según algunos podría seguir creciendo y llegar a taponar los drenajes). El sedimento de levadura que se va formando en el recipiente de fermentación se puede dejar en él, si bien cada dos o tres meses es conveniente tirarlo y lavar el recipiente con agua muy caliente.
Por último, otra cosa a tener en cuenta es que la kombucha no se fermente cerca de otros alimentos fermentados. Como por ejemplo, el kefir, el yogur o el chucrut. La contaminación cruzada de levaduras y bacterias puede ser problemática para el SCOBY y el resto de fermentados con los que estés trabajando.
Cuando tu kombucha tenga el sabor que te gusta, habrás terminado. ¡Enhorabuena! ¡Has fermentado tu primer lote de kombucha!  



PASOS A SEGUIR
                                                                                           






















QUE CANTIDAD SE DEBE TOMAR
Muchos toman un litro al día y esa era precisamente la dosis que se administraba a los pacientes de algunos hospitales militares rusos a principios del siglo. En realidad no hay límite alguno para la cantidad que se puede llegar a tomar, siempre que se cumplan dos condiciones muy importantes: comenzar de un modo gradual y beber mucha agua durante el día.
Debe  iniciarse tomando 100 ml. al día durante la primera semana (un tercio de vaso), aumentado la segunda semana a 200 ml. y la tercera a 300 ml.
A partir de la tercera semana se puede seguir aumentando paulatinamente la dosis, sin embargo la opinión generalizada es que un vaso grande de kombucha al día es suficiente para aprovecharse
de todas sus cualidades benéficas.
Si se manifestara alguna molestia o algún síntoma raro, reducir todavía más la dosis y esperar una semana antes de aumentarla de nuevo.
         
¿Cuál es tu opinión sobre la Kombucha? ¿Ya la habias hecho alguna vez’
Deja tus comentarios o dudas

lunes, 27 de enero de 2020

COMO MANTENERTE EN ARMONÍA


MANTENTE EN COMPLETA ARMONÍA


Desde el momento en que concebiste,  tu cuerpo y tu mente empezaron a cambiar.
 Hay momentos en los que sientes  una alegría avasalladora  y la vives plenamente  pero en otros momentos tantos cambios te preocupan, los cambios hormonales te afectan y a veces sientes miedo, tristeza, angustia.  Te diré un secreto para hallar tranquilidad durante el embarazo: Confía en ti, todo saldrá bien.
La tranquilidad está dentro de ti, así como todos los miedos y pensamientos negativos. Eres tú la dueña de tus pensamientos nadie más.  Tú tienes el poder elegir cómo vas a actuar frente a diferentes situaciones y, también tienes la facultad de elegir tus pensamientos. Siéntete  que posees una varita mágica que te hace súper poderosa, capaz de vencer cualquier miedo, angustia o pensamientos negativos. Eso depende de ti .
Te sugiero hacer meditación, yoga y escuchar  música  relajante.
 Te dejo dos  enlaces de videos ,  puedes poner audífonos y ponerlos en tu vientre para estimular a tu bebe













LA PAZ Y TRANQUILIDAD DEPENDE SOLO DE TI



viernes, 10 de enero de 2020

EL INICIO DE LA VIDA





A  la unión del óvulo y el espermatozoide se le llama FECUNDACIÓN, la cual es necesaria para que se pueda producir un embarazo.
 En la especie humana,  tiene lugar en el interior del cuerpo de la mujer, es decir  la fecundación es interna.
 Ésta es la llamada fecundación natural o 'in vivo'.
Actualmente es posible realizar la fecundación en un laboratorio de reproducción asistida,  conocido como fecundación artificial o fecundación in vitro.


Es importante en esta maravillosa etapa de  la mujer no pasar por alto las EMOCIONES.
El desarrollo del feto depende, en buena medida, del bienestar de la madre.  Si la futura madre  practica algo de deporte, sigue una buena alimentación, no toma drogas ni alcohol, lo cual es primordial para un buen desarrollo del feto.
Sin embargo no es solo eso lo que debería de cuidarse , ¿ qué hay de las emociones? ¿Afectan los sentimientos de la madre al niño?
Hace  mucho tiempo se creyó que no, que el feto ni sentía ni padecía en el útero de su madre, felizmente protegido por la placenta. Sin embargo se han  realizado numerosos  estudios científicos en las últimas décadas, los cuales señalan la importancia del  estado emocional de la madre durante la gestación, el cual va a afectar la salud mental del bebé a largo plazo.
Así como  una madre depresiva, ansiosa o estresada puede influir en el coeficiente intelectual de su hijo y propiciar  para que tenga más riesgos de padecer problemas tales como la hiperactividad o el síndrome de déficit de atención, entre otros.
Siempre  “La comercialización invita  a comprar cosas para el embarazo, ropa, cremas, lociones, para cuidar el cuerpo, para  estar a la moda, sin embargo casi nadie se interesa  sobre de cómo conectar corporal y emocionalmente con el bebé”
“En el proceso de la gestación que dura  nueves meses , la mujer pasa por un control prenatal, en ocasiones con diferentes ginecólogos , pero nadie le pregunta cómo está a nivel emocional o qué tal está la relación con su pareja. O si tiene presiones en su trabajo”


Les dejo un enlace para observar el proceso de la Gestación